Para nadie es desconocido que hemos pasado meses duros con la pandemia del Coronavirus, pero para nosotros es una alegría mostrarles lo que hemos denominado nuestra “postales del reencuentro”.
Nuestras puertas volvieron a abrirse a las familias de los adultos mayores, y con ello a toda la comunidad.
Hemos, paso a paso, iniciado la apertura de la residencia, recibiendo a familiares y amigos, quienes con medidas de protección visitan semanalmente a nuestros residentes.
Para lo mismo, hemos habilitados sectores para que tanto familiares como residentes se sientan seguros y cuidados, pero por sobre todo, para que puedan sentirse en confianza, alegría y en familia.
Esto está siendo toda una experiencia después de tantos meses de contacto telefónico y zoom. Nuestros residentes lo agradecen y se preparan para recibir a sus hijos, nietos y amistades. Esto se nota en mayores visitas a la peluquería, en que se preparan para recibir a sus familias los días que agendan o en que buscan formas de regalonearlos y mostrar afecto.
También queremos contarles que el proceso de apertura ha venido de la mano de volver paulatinamente a los talleres y actividades de forma presencial, con muchas medidas de seguridad, pero agradecidos por el encuentro personal.
Hemos tenido celebraciones, actividades musicales, Shabatot y muchos y entretenidos talleres con visitas, donde nuestros residentes han valorado el encuentro: “Ha significado una alegría a la casa”, “¡Nuevamente el hogar vuelve a tener mucha vida!”.