El 08 de marzo se conmemora a nivel internacional el Día de la Mujer, como un llamado a trabajar por la igualdad de derechos e integración de las mujeres en la sociedad. En lo que respecta al judaísmo, además, este año celebramos también Purim, fiesta que rememoramos que una mujer, Ester, fue esencial en la salvación de todos los judíos de Persia.
Como Consejo Chileno Israelí queremos aprovechar estas efemérides para relevar las figuras de cuatro mujeres judías cuyas contribuciones al desarrollo de las ciencias y artes las llevó a ser reconocidas a nivel mundial.
En el caso de Levi-Montalcini, sus descubrimientos son parte fundamental de la investigación para la cura del cáncer. Las obras Haza y Bat-Dori forman parte de nuestra vida judía diaria, acompañándonos en diversas formas en nuestros encuentros comunitarios, como rikkudim o representaciones teatrales. Mientras, la vida de Hanna Szenes nos inspira a luchar, hasta el último aliento, en defensa de nuestros hermanos judíos.
Rita Levi-Montalcini (1909-2012)
Neurobióloga italiana, que obtuvo el Premio Nobel de Fisiología y Medicina en 1986, siendo la cuarta mujer en recibir dicho Premio. Entre sus principales descubrimientos se relacionan con la comprensión de los mecanismos de control que regulan el crecimiento de las células y los tejidos.
Si bien creció en el seno de una familia judía italiana en Turín, posteriormente se declaró atea. Durante la Segunda Guerra, se vio obligada a huir a Bélgica, para luego tener que volver a Italia. Ahí estuvo en contacto con partisanos del “Partido D’Azione” y contribuyó a la causa falsificando documentos y ayudando como enfermera y médico voluntaria en el cuartel anglo americano al que eran llevados los refugiados.
En 1968, siendo catedrática de la Universidad de Washington en Saint Louis, Missouri, fue la décima mujer electa miembro de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos. De regreso en Italia, en 1962 estableció una unidad de investigación en Roma y desde 1969 hasta 1978 fue directora del Instituto de Biología Celular del Consejo Nacional Italiano de Investigación en Roma. En paralelo a su labor científica, se dedicó a promover el acceso a la educación de los jóvenes y las mujeres, especialmente en regiones desfavorecidas como África.
Hannah Szenes (1921-1944)
Paracaidista, luchadora de la resistencia en la Segunda Guerra Mundial y poetisa. Nació en 1921 en Budapest, Hungría, y abrazó el sionismo pronto en su juventud, uniéndose a Maccabea, una organización de estudiantes sionistas húngaros.
En 1939 hizo aliá, se unió al kibutz Sdot Yam y se enroló en la Haganá. Unos años más tarde, se alistó en la Fuerza Aérea Británica y fue reclutada en la Dirección de Operaciones Especiales. Entre 1943 y 1944, formó parte de la unidad comando de paracaidistas judíos que apoyaban tanto a las fuerzas aliadas como a los judíos europeos.
En 1944 fue apresada por gendarmes húngaros. En prisión fue reiteradamente interrogada y torturada, sin entregar nunca información. Fue acusada de traición por un Tribunal Militar y ejecutada el 7 de noviembre de 1944, a sus 23 años. En 1950, sus restos fueron llevados a Israel y enterrados en el Monte Herzl.
Hannah también fue poetisa y dramaturga, escribiendo tanto en hebreo como en húngaro. Su poema más conocido es “Halijá le Keisaria”, que luego fue musicalizado y popularizado como “Elí, Elí”.
Ofra Haza (1957-2000)
Hija de migrantes yemeníes, Haza es probablemente la cantante israelí más reconocida a nivel internacional. Criada en uno de los barrios más pobres de Tel Aviv, fue descubierta por un agente de la industria musical a los 12 años, cuando era parte de un grupo de teatro.
En sus canciones conjugó ritmos yemeníes, folk, pop y baladas. En 1983 participó en el Festival Eurovisión con la canción “Jai” y si bien quedó en segundo lugar, logró obtener reconocimiento más allá de Israel. Entre sus éxitos más conocidos destacan “Tfila” e “Im Nin Alu”, además de sus interpretaciones de “Yerushalaim Shel Zaav”. Durante su carrera, consiguió 16 discos de oro y platino cantando en hebreo, árabe, arameo, inglés, e incluso español.
Por otro lado, su impacto en la escena musical internacional se ve reflejada en que formó parte de la versión original del “Príncipe de Egipto” como la voz de Yohevet, e interpretó la canción “libéranos” en los 18 idiomas a los que se tradujo.
En enero de 2023, la revista Rolling Stone destacó a la artista dentro de su lista de 200 cantantes más importantes de la historia.
Shulamit Bat-Dori (1904-1985)
Shulamit Bat-Dori fue una dramaturga, directora teatral, productora, directora de festivales de danza y promotora del ideal kibutziano. Nació en 1904 en Varsovia, Polonia, y desde temprana edad estuvo expuesta al teatro, la música clásica y la danza. A los 16 años ingresó a la Universidad de Varsovia para estudiar filosofía y psicología.
Ingresó al movimiento socialista Hashomer Hatzair y de inmediato comenzó a producir obras de teatro junto con otros miembros. En 1923, hizo aliá y se unió al kibutz Mishmar HaEmek, donde, junto con su trabajo agrícola, escribió y presentó numerosas producciones teatrales, algo impensado en el ambiente kibutziano.
Sus obras están a la base del género del “teatro de kibutz” y tuvieron un marcado carácter político, además de contar con una gran producción, realizada y dirigida prácticamente por completo por Bat-Dori. Generalmente las presentaba en el exterior, usando la naturaleza como ambientación y escenario. Una de sus grandes producciones fue una adaptación de la novela “Mis Gloriosos Hermanos”, en la que hizo un paralelo entre la Revolución Maccabea y la Guerra de Independencia israelí. Otras de sus obras más reconocidas son “El Juicio” y “When You, A Simple Man, Set Out on Your Way”.
Además del teatro, Shulamit dirigió festivales nacionales y folklóricos de danza, en los que incluyó las poco conocidas coreografías de los judíos amazigh, como se conoce a los judíos de la región del MAGREB, y libios.