La pandemia ha significado un quiebre en las rutinas de alumnos y familias de casi todo el mundo como en todos los momentos evolutivos, impactando en lo emocional y relacional tanto de niños como adultos. Para todos, ha implicado una reorganización en la forma de vida y la puesta en acción de recursos personales y familiares relacionales para ello.
Claramente este escenario tiene un lado de preocupación, ansiedad, incertidumbre y cansancio.
Pero también este momento puede ser una oportunidad de estar, organizarnos diferente y también compartir.
Y eso es lo que el Instituto Hebreo, a través de su Unidad de Apoyo Pedagógico (UAP), quiere transmitir a las familias. Esto último muchas veces es difícil de vivir, pero visualizarlo es aliviador y ayuda a estar mejor.
Como colegio sabemos que el día a día es difícil para los adultos, por la multiplicidad de roles, preocupaciones y tareas que cumplir. Para los niños y jóvenes también, en lo suyo y a su medida, en ámbitos diversos como lo escolar, afectivo y social. En esta entrevista, Ana María Sáenz, coordinadora de la UAP del Instituto Hebreo, comparte algunas reflexiones y los principales desafíos que el equipo de psicólogas y psicopedagogas del colegio tiene en este contexto.
¿Cómo el Hebreo aborda la dimensión emocional en este escenario? ¿Cuál es el mayor desafío?
– Como unidad de apoyo pedagógico (UAP) somos un equipo comprometido con la salud de toda la comunidad educativa. Por eso, estamos acompañando a nuestros niños/as, jóvenes y padres en este momento, especialmente aquellos que más lo necesitan. De acuerdo a las edades, nos hemos contactado con padres, niños/as y jóvenes para saber de ellos y hemos continuado en comunicación con aquellos que lo han requerido utilizando el correo, teléfono y reuniones por Zoom.
Hemos continuado apoyando en los aprendizajes, especialmente en este momento que para varios estudiantes el proceso de aprendizaje virtual les ha sido más complejo.
Estamos en permanente contacto con los morim y de forma colaborativa se busca generar las mejores condiciones de apoyo y contención para los talmidim. Es así como los Consejos de Curso se consideran espacios de gran valor para contribuir a la integración y vinculación en los cursos, expresión y contención de necesidades afectivas, de distensión y bienestar individual y grupal.
Los morim han sido personas clave, mostrando una gran disposición y creatividad para generar acciones de apoyo.
Nuestro sitio también quiere ser un espacio de acompañamiento y aporte para nuestros padres y estudiantes.
En la actualidad y en lo que estamos viviendo, como UAP tenemos dos desafíos muy importantes: acompañar a todos quienes lo puedan necesitar y constituirnos en un apoyo efectivo, respetuoso, flexible y especialmente empático para cada persona y/o familia de nuestra comunidad. Hemos cuidado apoyar respetuosamente y que las familias perciban nuestra disponibilidad.
¡Esperamos con mucha fuerza estar cumpliéndolos!
¿Cuáles son las preguntas o situaciones por las que los papás llegan a la UAP en este contexto?
– Los papás se han contactado y han respondido a nuestros mensajes de manera dedicada, planteando inquietudes con respecto al bienestar emocional de sus hijos, apoyo a los hijos/as en la organización y respuesta a las tareas escolares como también para expresar lo difícil de la organización de la vida familiar en estos momentos.
Ha habido un proceso de adaptación en el tiempo, reportando los padres sentirse más organizados en este momento, especialmente en familias de niños más grandes.