Actualidad, COMUNIDAD SEFARADÍ

LA HISTORIA Y LA MÚSICA SE UNEN EN UN NUEVO ANIVERSARIO DEL EDICTO DE GRANADA

La Comunidad Sefaradí realizó una emotiva conmemoración del Edicto de Granada, reuniendo a más de un centenar de personas para reflexionar y rendir homenaje a los conversos, aquellos judíos que, hace más de cinco siglos, optaron por convertirse al cristianismo para evitar la expulsión de la península ibérica. Sin embargo, muchos de ellos finalmente enfrentaron igual destino, llegando eventualmente a diferentes partes de América, incluido Chile.

 

El evento tuvo como actividad central un relato histórico basado en investigaciones que integró música y narración. Esta presentación, a cargo del Coro Sefarad de la Comunidad, contó también con la participación de un grupo de alumnos de primero medio del Instituto Hebreo, quienes emocionaron profundamente a los asistentes con canciones y melodías especialmente seleccionadas para la ocasión.

 

En la bienvenida al evento, el embajador de Israel, Gil Artzyeli, ofreció unas palabras a los presentes. Refiriéndose a la expulsión de los judíos hace ya cinco siglos, destacó con firmeza: “En 1492 los judíos no fuimos dueños de nuestro futuro; hoy sí somos dueños de nuestro futuro y de nuestro presente, para asegurar que estas fechas no vuelvan a ocurrir”. 

 

Además, el encuentro contó con la participación del destacado académico Ignacio Chuecas, experto en la historia de los conversos y profesor titular de la Universidad Finis Terrae. Durante su ponencia, abordó principalmente la persecución que estos cristianos nuevos enfrentaron en los tribunales del virreinato del Perú, destacando la existencia de un colectivo cuyo legado permanece en gran medida desconocido, ya que los registros oficiales se limitan sólo a los procesos de la Inquisición.

El acto también contó con la participación de representantes diplomáticos de países como Israel, España, Portugal, Marruecos, Turquía y Azerbaiyán, junto a la presidenta de la Comunidad Sefaradí, Mery Nachari, los rabinos Daniel Zang y Efraím Rosenzweig, miembros del directorio, y autoridades de diversas instituciones comunitarias.

 

Conmemoraciones como ésta son un recordatorio del poder de la memoria histórica y del compromiso de la Comunidad Sefaradí con la preservación de su legado. 

A través de estas actividades, se reafirma la importancia de reflexionar sobre el pasado para construir un presente y futuro marcados por la justicia, la tolerancia y el respeto mutuo.

 

Posteriormente los invitados participaron de un cocktail en el Hall Central de la comunidad, para disfrutar de un momento de distensión y camaradería, además de fortalecer lazos y conexiones entre los diplomáticos presentes en el encuentro cultural.