En el tejido de la historia contemporánea, la fecha del 7 de octubre de 2023 quedará marcada como un hito de dolor y desafío para Israel y todos los judíos del mundo. Desde entonces, la nación ha estado inmersa en un mar de complejidades, con la esperanza de la paz vislumbrándose distante en el horizonte. En estos momentos cruciales, nuestra solidaridad y apoyo económico son pilares fundamentales para mantener en pie a las fuerzas de defensa israelíes y para ofrecer asistencia a aquellos que han sido afectados por los acontecimientos más trágicos a los que se ha enfrentado Israel en los últimos años.
Sin embargo, en esta encrucijada de dificultades, no podemos permitirnos desviar la mirada de las necesidades que existen en nuestro propio hogar, aquí en Chile. Nuestro país también atraviesa una crisis económica de proporciones desafiantes, la cual exige una respuesta solidaria y comprometida.
Es esencial que apoyemos a las instituciones locales que se dedican incansablemente a brindar ayuda a quienes más lo necesitan, especialmente a nuestra comunidad judía, que en estos momentos requiere de una red de apoyo más que nunca.
Entre estas instituciones se encuentra Reshet, cuyo incansable trabajo se enfoca en garantizar que ningún miembro de nuestra comunidad se quede sin comida, medicamentos, atención médica o apoyo en salud mental. Desde su compromiso con nuestras familias, Reshet es símbolo de Tzedaká, ofreciendo un refugio seguro y un hombro amigo para aquellos que atraviesan tiempos difíciles.
Es en estos momentos de prueba que debemos reafirmar nuestro compromiso con los valores de la solidaridad y la empatía. La solidaridad no conoce de fronteras ni de distancias; es un lazo que une corazones y mentes en una red de apoyo mutuo y comprensión.
Por lo tanto, instamos a cada miembro de nuestra comunidad, tanto en Israel como en Chile, a unirse en este acto de solidaridad y generosidad, extendiendo nuestra mano amiga con amor y preocupación hacia aquellos que más lo necesitan.
En tiempos turbulentos, la solidaridad se convierte en la luz que ilumina el camino hacia un futuro más justo y equitativo. Sigamos trabajando juntos, unidos en el propósito común de construir una comunidad donde la ayuda mutua y el apoyo incondicional sean los pilares fundamentales de nuestra convivencia.