100 años
Hoy tenemos el honor de compartir un poco sobre la historia de vida de nuestra querida residente Jenny Gleiser, quien este año cumplió 100 años.
Jenny Gleiser Daj, es la menor de 5 hermanos, fue la primera de su familia en nacer en Chile. Sus padres emigraron desde Ataki, Moldova, escapando de los pogroms, y se establecieron inicialmente en Argentina, en Entre Ríos. Más tarde, decidieron continuar su viaje hacia Chile, estableciéndose finalmente en Talca.
Nació en Talca el 20 de febrero de 1924, donde experimentó el impacto del devastador terremoto de 1928, que los obligó a pasar la noche en un automóvil. Completó sus estudios primarios en esta ciudad.
Desde una edad temprana, Jenny demostró un talento especial para el deporte, destacándose particularmente en el baloncesto. Llegó a ser seleccionada nacional y formó parte del equipo titular que se consagró Campeón Sudamericano. Continuando con su formación, asistió a la Universidad Católica, donde se graduó como Ingeniera Comercial.
Jenny construyó una sólida y exitosa carrera en el Banco Israelita de Chile.
Además, dedicó una parte significativa de su tiempo libre al servicio comunitario, colaborando activamente tanto con la Cruz Roja como con la masonería chilena, alcanzando altos cargos en ambas instituciones.
A lo largo de los años, la familia de Jenny se dispersó entre Chile, Israel y Argentina.
A los 91 años, llegó a vivir a nuestra residencia, en ese entonces conocida como Villagra y ubicada en Ñuñoa.
Siempre ha demostrado ser sumamente amable, alegre y carismática.
Desde el principio, ha mantenido un gran interés en participar en los talleres y actividades que se le proponen, mostrando diversos talentos artísticos en el taller de pintura y manualidades. Además, ha demostrado una gran habilidad con los números, calculando operaciones matemáticas con rapidez y precisión.
No podemos pasar por alto su participación en el taller de huerto, donde su motivación y ayuda han sido fundamentales. Gracias a su dedicación, los tomates Cherry, los zapallitos y las lechugas han florecido de manera excepcional, demostrando su habilidad para cuidar y cultivar la naturaleza.
Jenny es una persona muy querida por todos, tanto por el equipo de salud y por los colaboradores de la residencia.
Siempre está rodeada de sus amigas, con quienes comparte día a día en los espacios comunes como el jardín, la cafetería, el comedor y los talleres. Esta rutina permite que se mantenga activa y saludable, favoreciendo en su proceso de envejecimiento y su bienestar físico y emocional.